Medios y Modernidad

García/Thompson



Convergencias.

            Ambos autores hablan acerca de los avances tecnológicos que  están en auge en su respectiva época y cómo estos influyen en el proceso comunicativo de forma positiva. García expone que en la actualidad se está en un mundo globalizado gracias a la tecnología de la comunicación. Ya no es solo la radio, la televisión y la prensa las que tienen el monopolio de la trasmisión de mensajes. Thompson hace referencia igualmente a los cambios en las tecnologías en menor medida con el inicio en cuanto al uso de nuevos satélites a los cuales se le hace énfasis de forma muy lejana.


           García habla del poder que tienen los medios en la sociedad, partiendo de la premisa de que quien controle y esté en los medios podrá controlar la sociedad. Constante histórica de la relación entre el poder político y económico con el de los medios. Por su parte Thompson se refiere al poder como un fenómeno social, dividiéndolos en cuatro poderes que están bien explicados en la guía: poder político: autoridades. Económico: producción y recursos. Coercitivo: fuerza y militar y simbólico: producción de medios de información y comunicación. El ejercicio del poder por parte de las autoridades siempre ha estado próximo al control de la información y la comunicación.

Divergencias.

            García habla que gracias al surgimiento de las plataformas digitales se ha roto el predominio de la unidireccionalidad de la comunicación, es decir, nuevas expectativas en opinión pública contemporánea, que antes partía de lo que se publicaba en los medios tradicionales, ahora se construye al margen de los medios, es más activa. Por su parte Thomson, aunque no lo dice de forma de explicita, sigue destacando la unidireccionalidad de los flujos de comunicación, explicando que la capacidad de los receptores para intervenir o responder es limitada, convirtiéndolos en pasivos.

Relación con el 2014.
            Habla de la devaluación de los contenidos. Lo cual es un efecto dominó, es decir, a medida que el poder político imponga más restricciones y controles al ejercicio del periodismo, este terminará disminuyendo la calidad de sus mensajes, trayendo como consecuencia una desorientación de la opinión pública, que se verá obligada gracias a su carácter activo actual a buscar nuevas fuentes de información.
            Gracias al nuevo escenario el pasado está más cerca de nosotros y a un clic. Es importante destacar que gracias a la comprensión del pasado se nos proporciona nuevos códigos para entender el presente y evitar ser moldeados por la propaganda o el periodismo malsano. Ej. Caso actual de la propaganda actual de PDVSA, que busca suprimir todo el esfuerzo hecho por la Cuarta en materia de hidrocarburos, cuando es bien sabido que gracias al accionar de Juan Pablo Pérez Alfonso y Rómulo Betancourt fue que se creó la OPEP, organización que rige nuestro mercado petrolero.